En un lapso de 102 días, las fuerzas de la Policía Nacional lograron ubicar y neutralizar a José Antonio Figueroa, conocido como «Kiko La Quema», señalado como el líder de una banda criminal implicada en una serie de delitos que abarcan desde homicidios, robos, secuestros, sicariatos, hasta microtráfico de drogas, cobros compulsivos, extorsión, tráfico de armas, invasión de terrenos y lavado de activos.
La búsqueda de Figueroa inició el 27 de noviembre del 2023, cuando el presidente de la República, Luis Abinader, instó al presunto criminal a entregarse a las autoridades para evitar un enfrentamiento con las fuerzas del orden. A pesar de extensos operativos desplegados durante más de tres meses, «Kiko La Quema» desafiaba a las autoridades dominicanas.
La «Operación Montaña» fue la respuesta estratégica que finalmente llevó al abatimiento del reconocido criminal. Esta operación tenía como objetivo desmantelar la peligrosa estructura criminal que operaba desde San Cristóbal.
En noviembre pasado, el presidente Abinader advirtió a Figueroa que entregarse era la mejor opción, asegurando que no encontraría apoyo alguno. Durante ese tiempo, la Policía Nacional había informado sobre la muerte de «Pupi el Sicario», lugarteniente de «Kiko La Quema», y la detención del teniente coronel retirado de la Policía Elvis de la Rosa de León, junto a Jonathan Emeterio Lorenzo, por presuntos vínculos con la banda.
Abinader calificó a «Kiko La Quema» como el «número uno» en la lista de búsqueda, liderando una poderosa estructura criminal que no solo se dedicaba al tráfico de drogas, sino también al manejo de armas de alto calibre. En los registros policiales, «Kiko La Quema» figura con varias fichas, incluyendo la implicación en la muerte de Alexander Medrano Colón, de 21 años, en Cambita.
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